Billeteras digitales: ¿pueden las fintech competir con las empresas financieras reguladas en el Perú?

Las empresas fintech se caracterizan por utilizar la tecnología para innovar productos, servicios y modelos de negocios en la industria financiera, de modo que puedan competir con el sector financiero tradicional. Dentro de estos modelos podemos encontrar a las billeteras digitales, las cuales son herramientas creadas para facilitar pagos y transferencias de dinero de manera 100% digital, promoviendo la inclusión financiera y reduciendo el uso de dinero en efectivo.
En el caso del Perú, se observa que las billeteras digitales que tienen una mayor cuota de participación en el mercado de pagos son Yape (BCP) y Plin (BBVA, Interbank y Scotiabank), ambas administradas por empresas bancarias. Esto podría tener como uno de sus motivos el hecho que, hasta hace un par de años, las billeteras no podían realizar transferencias de fondos entre sí, pues no tenían acceso a una infraestructura que lo permitiera. Como resultado, los usuarios de billeteras digitales (no bancarizadas) administradas por fintech estaban limitados de poder efectuar pagos y transferencias hacia las billeteras más conocidas (Yape y Plin), lo cual generaba un evidente desincentivo para su uso.
Al respecto, con el objetivo de dinamizar el mercado de servicios de pagos digitales, el Banco Central de Reserva del Perú (“BCRP”) emitió, entre otras, dos normas para fomentar la interoperabilidad en el ecosistema de pagos: (i) el Reglamento de Interoperabilidad de los Servicios de Pago (Circular No. 0024-2022-BCRP); y, (ii) el Reglamento de los niveles de calidad de los Servicios de Pago Interoperables (Circular No. 0009-2024-BCRP). La interoperabilidad consiste en propiciar que los usuarios puedan realizar transferencias y pagos digitales entre las distintas billeteras y/o herramientas análogas en el mercado, sean estas administradas por fintech o por empresas financieras reguladas.
El avance de la implementación de la interoperabilidad propiciada por el BCRP denota un incremento significativo en el volumen de pagos digitales; sin embargo, estas mejoras parecen no haber beneficiado en gran medida a la competitividad de las billeteras administradas por empresas fintech, pues uno de los requisitos para ingresar al sistema de transacciones en tiempo real (pagos inmediatos) consiste en obtener un código de participante en la Cámara de Compensación Electrónica (“CCE”), al cual solo tienen acceso las empresas del sector financiero regulado.
Como consecuencia de lo anterior, algunos participantes del sector fintech se han asociado con empresas emisoras de dinero electrónico (EEDE) para poder ofrecer billeteras digitales con la capacidad de transferir fondos de manera inmediata, dado que las EEDE, en su calidad de empresas reguladas por la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (“SBS”), se encuentran autorizadas para acceder a la CCE.
En esa línea, podemos mencionar el caso de Prexpe, la cual, con el respaldo de la EEDE Gmoney, se convirtió en la primera billetera digital administrada por una fintech en obtener un código de participante en la CCE. Gracias a ello, los usuarios de la billetera Prexpe pueden realizar pagos y transferencias de manera inmediata hacia otras billeteras digitales, e incluso hacia cuentas en instituciones reguladas (como bancos, cajas, financieras, entre otras). Asimismo, el pasado 9 de noviembre de 2024, el grupo Prex obtuvo la autorización de organización de una empresa de créditos por la SBS, en virtud de la Resolución SBS n° 03609-2024. De esta manera, Prexpe podrá convertirse en la primera billetera digital administrada por una fintech en ingresar al sistema financiero regulado.
Sin perjuicio de lo anterior, debemos enfatizar que las fintech, en general, no aspiran a incursionar en el sector regulado, dado que el costo de operación regulatorio es elevado y el procedimiento de licenciamiento suele ser complejo. Las empresas de este sector buscan que sus servicios puedan coexistir y competir de manera saludable con el sector financiero regulado, sin depender de este último.
En ese sentido, el BCRP se encuentra trabajando en un proyecto normativo para implementar una nueva fase en el esquema de interoperabilidad de pagos, la cual incluirá un modelo de acceso al ecosistema interoperable por parte de empresas fintech y otros participantes. Este modelo se denominaría “open payments” y, en principio, estará basado en una arquitectura digital abierta para facilitar la iniciación de pagos para la industria fintech. Se estima que la norma que apruebe este nuevo modelo podría llegar en 2026. Estaremos atentos.
Por Giovanni Huamaní, asociado del área de Mercado de Capitales y Regulación Bancaria.
Publicado en la revista Columnas del estudio edición n°219.